Las indicaciones del monitor sirven para indicar y corregir los ejercicios y motivar a los usuarios de las clases de actividades dirigidas con música o que entrenan en grupos reducidos. Debemos usar la comunicación para que los clientes se muevan de forma más efectiva y eficiente.
Conoce nuestro curso de Actividades dirigidas VER CURSO
Indicaciones verbales del Monitor: propioceptivas y exteroceptivas
En general, los monitores de actividades de Fitness en grupo usan instrucciones verbales para comunicarse y dar instrucciones a los clientes y pueden realizar los ejercicios con corrección.
Está demostrado que las instrucciones verbales mejoran el control motor y el aprendizaje de los ejercicios cuando queremos mejorar la calidad del movimiento de nuestros clientes.
Las indicaciones o señales que les hacemos mejoran la habilidad de los usuarios a la hora de realizar el movimiento y, a la larga, les ayudan a desarrollar capacidades automatizadas a la hora de hacer un determinado ejercicio.
Esta capacidad de automatizar, que es inconsciente, es la que permite a la persona realizar el gesto sin pensar y centrarse más en la intensidad o en el rendimiento.
Por ejemplo, cuando una persona realiza fondos o sentadillas y ha adquirido la destreza de realizarlo correctamente de forma automática, puede intentar hacer más repeticiones o hacer el movimiento con más intensidad.
Los monitores de Fitness en actividades dirigidas pueden ayudar a sus clientes a moverse con más eficiencia, usando dos tipos de indicaciones verbales: las propioceptivas (kinestésicas o internas) y las exteroceptivas (externas).
Las indicaciones propioceptivas son las que centran la atención de la persona en sus sensaciones corporales más que en el resultado del movimiento en sí.
Estas indicaciones centradas en el interior del cuerpo se pueden usar para mejorar el aprendizaje de movimientos y el rendimiento en alumnos principiantes que necesitan una mejora importante de sus habilidades y patrones de movimiento.
Las indicaciones kinestéticas dirigen la atención del cliente hacia su propio cuerpo y el propio proceso del ejercicio que va a realizar. Es el tipo de indicación que se da cuando decimos, por ejemplo: “nota que tu columna se alarga” o “siente como el pie empuja al suelo”.
Se pueden usar también indicaciones exteroceptivas o centradas en el gesto para mejorar la ejecución de los ejercicios y el rendimiento en todos los perfiles de usuario.
Estas señales dirigen la atención de la persona hacia el efecto del movimiento, su resultado y cómo repercute en el entorno en relación a como se ha hecho el ejercicio. Son ejemplos de estas indicaciones externas “empuja la barra/peso hacia arriba” o “presiona sobre la Fitball”.
Se ha demostrado que las indicaciones orientadas hacia el resultado, “lo exterior” son las más efectivas a la hora de mejorar las habilidades motoras y el rendimiento en todas las poblaciones y que aumentan la eficiencia y eficacia de los movimientos.
La eficiencia es la precisión o fiabilidad con la que hacemos los gestos mientras que la eficiencia es la capacidad de hacerlos con el mínimo desgaste mental y de energía.
En comparación, las indicaciones kinestésicas no han mostrado ser las más efectivas en el aprendizaje motor y en el rendimiento, aunque en determinadas situaciones y para determinados objetivos se ha visto que son efectivas; por ejemplo, mayor reclutamiento muscular o mayor autoconciencia corporal.
Por tanto, se recomienda usar ambos tipos de indicaciones cuando dirigimos una sesión de entrenamiento grupal. Aplicado a la actividad en situación real, cuando enseñamos un ejercicio nuevo, podemos empezar por usar 2 o 3 indicaciones externas para indicar el movimiento que deseamos que haga el grupo.
De esta manera, los usuarios conocerán cuál es el objetivo del ejercicio. Esto da tiempo a la persona para captar la información, sentirse capacitado para hacer el gesto y no saturarse de información.
Como monitor observa que indicaciones son las mejores en cuanto a calidad del movimiento, rendimiento y motivación. Las indicaciones más kinestésicas pueden venir a continuación para mejorar o afinar el movimiento de los usuarios.
Indicaciones visuales del Monitor
Al principio hemos hablado de las indicaciones verbales. Otro tipo de indicaciones son las visuales, en las que hacemos una demostración ante el grupo de cómo debe hacerse el ejercicio.
El monitor realiza el ejercicio y el grupo observa cómo debe realizarlo. Para ello es necesario que su ejecución sea muy correcta, el movimiento lento y fluido y, que vaya acompañado de una explicación en la que se comenten los aspectos más destacados a la hora de realizar el movimiento.
Finalmente, otro tipo de indicaciones para la comunicación con el grupo de actividades dirigidas son las señales (con las manos) y la mímica. Aunque también forman parte de la comunicación, sirven más bien para dirigir al grupo, indicar direcciones, repeticiones o para motivar, por ejemplo.
Estas indicaciones también son muy útiles y su funcionamiento se basa en las famosas “neuronas espejo” y que tienen mucho que ver con el aprendizaje y la empatía.
Conclusión
Recordemos que todas las personas son diferentes y que cada uno de nosotros es más receptivo o sensible a un tipo de información específica. Los monitores de actividades de Fitness en grupo deben usar todos estos recursos para llegar a comunicarse correctamente con todo el grupo y que cada uno de sus componentes reciba el mensaje en la forma que le es más conveniente.
En definitiva; como monitores disponemos de una gran variedad de herramientas de comunicación, de señales. Debemos usarlas todas, emitirlas de forma clara y bien formulada, con voz modulada y calidad de ejecución en las demostraciones.
Nuestra actitud también forma parte de nuestra comunicación y debemos usar todos estos recursos para que nuestros clientes se muevan de forma adecuada y alcancen el rendimiento físico que les va a garantizar obtener resultados y alcanzar sus objetivos.