Hace poco leyendo un blog de Fitness muy conocido vi una de las frases que mas me gusta al empezar cualquier formación:
» Hay miles de métodos pero sólo unos pocos principios.
Quien entiende los principios podrá elegir sus propios métodos.
Quien ignora los principios fracasará con cualquier método»
– Harrington Emerson
Uno de los problemas con los que nos encontramos los formadores del sector es que estamos en una sociedad donde nos encantan las “recetas” fáciles y universales que nos soluciones todos los problemas, y sino es así, nos lo creemos.
Hay cosas de las que todo el mundo opina o cree saber: futbol, política y EJERCICIO.
Vas a cualquier instalación y enseguida ves a cualquier persona recomendando un ejercicio a su amigo/a, pareja, familiar, y sin duda lo hacen con su mejor intención.
Haciendo una analogía, no se me ocurre que en cualquier quirófano entre cualquiera, y le diga al cirujano como debería hacer su intervención, que anestésico debería utilizar, que dosis, como debería hacer la incisión, y todo el proceso que necesite la operación.
Os aseguro que me ha sucedido varias veces el recomendar un ejercicio y haber una persona al lado, sobre todo familiares y amigos y enseguida dar su opinión sobre esa recomendación o contar su experiencia sobre que ejercicio es el mejor según lo que preguntaba el alumno o cliente.
No se porque, pero existe la infundada creencia que cualquiera puede prescribir ejercicio y además hacerlo bien.
Pues tengo que reivindicar que NO, para prescribir ejercicio hay que estudiar y conocer en cierta profundidad bases de Anatomía, Fisiología, Biomecánica entre otras…
A esto hay que añadir que dicen las ciencias de como entrenar la Fuerza, como mejorar las capacidades cardiovasculares y la movilidad articular, y este conocimiento teórico tiene que venir acompañado de varios años de practica.
Aun así, nos podemos equivocar, porque trabajamos con una de las herramientas mas compleja que hay en el Universo, el cuerpo humano.
Creo que no nos damos cuenta de la responsabilidad que hay al prescribir un ejercicio en cierta dosis, orden y frecuencia.
Que por no tener un bisturí o fármaco no podemos crear daños profundos e irreparables y os puedo decir por cierta experiencia que he visto lesiones irreversibles debido a ejercicios inadecuados para personas concretas.
El curso de Acondicionamiento Físico en sala de Fitness de Orthos es un curso base, lo cual no quiere decir sencillo o simple, sino que estudiamos las bases para que con los conocimientos que se tiene en la actualidad, puedas ajustar del modo mas correcto los ejercicios con su dosis, orden, frecuencia y progresión mas apropiada a los alumnos con los que puedas trabajar en un futuro.
La Anatomía que estudiamos no es solo una ciencia descriptiva, que cuenta como son los huesos, y el origen e inserciones musculares.
Tiene un fin funcional, veremos como son las articulaciones para saber que movimiento pueden producir, las acciones de estos músculos, como producen movimiento, cuales y como estabilizan esas articulaciones por las que cruzan. Y por supuesto la parte practica de que ejercicios realizar según las necesidades y carencias de nuestros clientes.
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En la Fisiología veremos algo mas que como se produce una contracción muscular, temas tan esclarecedores de como el cuerpo combustiona los diferentes sustratos para poder llegar a la tan codiciada grasa que todos queremos eliminar.
En Biomecánica veremos las diferencias entre usar distintos tipos de resistencias, como peso libre, maquinas guiadas, poleas, y gomas.
Eliminando ciertos mitos como podrían ser que las gomas se deben usar para rehabilitación, el peso libre para fuerza e hipertrofia, o que las maquinas guiadas no son funcionales.
También enseñamos a organizar un programa, cuales son las bases para crear un entrenamiento de hipertrofia, de perdida de peso, de “puesta en forma”, como combinar el programa de fuerza con el trabajo cardiovascular ,y como mejorar tus limitaciones de movilidad articular.
Y por último un bloque de actividades colectivas, donde los alumnos podrán aprender a dirigir a un grupo de usuarios en actividades colectivas diferenciando la sesión en sus partes correspondientes, su calentamiento, parte principal y vuelta a la calma con ejercicios seguros y correspondientes a cada una de ellas.
Os aseguro que no perdemos el tiempo, y que creamos unos cimientos sólidos para que este proceso de aprendizaje que inicies en esta formación pueda seguir creciendo desde el rigor científico y conocimiento, lejos de modas y sistemas que en pocos años nadie recordara y usara.
Si quieres ser un buen profesional, hay que empezar haciendo las cosas bien, y para eso hay que tener unas buenas bases, para que luego esos sistemas que apliques tengan sentido y un criterio para poder aplicar esas herramientas. Te aseguro que puedes marcar la diferencia…
Por Javier Labrador